Origen Desorigen (2006)
«El ordenador no es una máquina inteligente que ayuda a gente estúpida; de hecho, es una estúpida máquina que funciona solo en manos de gente inteligente.» – Humberto Eco
La serie «Origen Desorigen» se adentra en el umbral entre lo orgánico y lo tecnológico, planteando interrogantes sobre la naturaleza de nuestra existencia contemporánea. A través de una meticulosa combinación de frutas, verduras y elementos electrónicos, esta colección invita a la reflexión sobre cómo la tecnología ha transformado nuestras vidas, convirtiéndose en un alimento social que aparentemente «nutre», pero también aliena.
En un mundo donde la realidad digital y la física coexisten de manera cada vez más intrincada, esta serie intento confrontar con la dualidad inherente a nuestra relación con la tecnología. Las frutas y verduras, símbolos de vida y vitalidad, se entrelazan con dispositivos de la era digital (en este caso casi obsoletos, objetos del año 2006, hace 19 años) que representan la fugacidad de la innovación. Cada imagen escaneada, cada elemento electrónico, se convierte en un testimonio de los cambios en nuestra cultura moderna occidental, donde lo natural y lo artificial colisionan, generando un espacio de diálogo sobre nuestra identidad y percepción.






Mi obra no solo retrata la coexistencia de estos mundos, sino que también invita al espectador a cuestionar su propia relación con la tecnología. ¿Hemos permitido que las máquinas guíen nuestra inteligencia y atención? ¿Nos hemos convertido en meros espectadores de nuestra propia vida, alimentados por las pantallas que nos rodean? Estas interrogantes emergen como eco de la crítica de Eco (valga la casual redundancia) subrayando la necesidad de una introspección profunda sobre nuestro papel en esta era digital de la cual nosotros como usuarios debemos ser conscientes.




Dos nuevas capas en esta colección, después de 17 años desde su creación
Los elementos utilizados en esta colección, que en su momento no incluían «smartphones» ni «Wi-Fi», ahora son testigos de una historia que ha cambiado. Las obras capturan la dualidad entre la belleza de lo natural y la obsolescencia de lo tecnológico, ofreciendo un espacio de reflexión sobre nuestra coexistencia con estos mundos dispares.
Después de 17 años de experimentación con nuevas tecnologías, he decidido retomar esta primera colección creada con escáner y enriquecerla con dos capas adicionales: la animación de las imágenes mediante inteligencia artificial, que sólo se puede apreciar en realidad aumentada, paradogicamente con un télefono móvil actual.

Para ver las imágenes animadas en realidad aumentada, descarga la app ArtVive y experimenta el universo de «Origen Desorigen». Pero por favor no te olvides, de volver de nuevo a conectar con tu realidad más próxima fuera del teléfono 🙂